Switch Mode

renacer sin perdon 1175

renacer sin perdon 1175

Rosana le dio vueltas una y otra vez a la situación, pero seguía sintiéndose incómoda

Si hoy hubiera sido cualquier otra persona, seguro que se habría conmovido. Al fin y al cabo, en su infancia, también fue su mamá quien la sacó del carro en un accidente, permitiéndole sobrevivir

Tal vez era por ver el rostro de Estefanía que no podía emocionarse. Esa cara le impedía conectar con la escena, más bien le provocaba cierta desconfianza

Sin embargo, Estefanía también había actuado para salvar a su hija

Quizá, en esos momentos críticos, cualquier mamá habría hecho exactamente lo mismo

Solo que, al ver ese rostro, Rosana no podía evitar sentirse incómoda y alerta, como si algo se le atorara en el pecho. Tirada en la cama individual, Rosana no podía dejar de pensar en el beso que se había dado con Dionisio hacía unos minutos. En cuanto la imagen cruzaba su mente, sentía que la cara se le encendía de calor

Se dio cuenta de que le gustaba estar cerca de él, esa intimidad la hacía sentir extraña pero emocionada

Rodó un par de veces sobre la cama, inquieta, sabiendo que no podía seguir así. Tenía que distraerse con algo, cualquier cosa para no perderse en sus pensamientos

Se sentó y caminó hasta la puerta de la sala de descanso, desde donde se escuchaban voces discutiendo sobre temas de trabajo

Al asomarse, pudo ver a Dionisio sentado en una silla, con el perfil serio y la mirada fija. Toda su presencia era distinta a la que mostraba con ella; se veía poderoso, dominante. Un aura de autoridad lo envolvía, y Rosana se quedó observando, fascinada

Ese Dionisio, tan concentrado y decidido, tenía algo que la atraía. Sin resistirse, sacó su celular y, aprovechando que nadie parecía notarla, intentó tomarle una foto para guardar el momento

Sin embargo, olvidó quitarle el sonido al teléfono, así que el clásico -clic- de la cámara resonó con fuerza en la sala. Dionisio frunció el ceño de inmediato y volteó hacia los ejecutivos presentes en la reunión

-¿De quién es ese celular que está sonando

Los ejecutivos palidecieron al instante y bajaron la cabeza para revisar sus celulares, temerosos de que se tratara del suyo. Nadie quería ser el que molestara al jefe, sabiendo lo estricto que era con ese tema

Por dentro, todos pensaron lo mismo: aunque no hubieran puesto el modo silencio, ¿cómo iba a sonar así una cámara? No tenía sentido

Pero en un ambiente tan tenso, lo último que importaba era si tenía sentido o no

Revisaron sus celulares y, claro, no encontraron nada extraño. Todos sabían que el jefe detestaba que los aparatos hicieran ruido durante las reuniones, así que siempre tenían cuidado con eso

Dionisio apretó los labios, su tono se volvió aún más serio

-¿Quién fue

La secretaria, nerviosa, miró de réojo hacia la sala de descanso

Dionisio notó su mirada, giró y vio a Rosana parada en la entrada, con el celular en la mano y una expresión de culpa en la 

cara

Rosana levantó el teléfono, apenada, y balbuceó

-PerdónSe me olvidó ponerlo en silencio

Apenas la vio, la dureza de Dionisio se desvaneció, y su expresión se suavizó notablemente

Se llevó la mano a la boca y tosió para disimular, luego le habló

-¿Te aburres? Si quieres, puedo pedirle a alguien que te lleve a dar una vuelta

-¡Sí, por favor

Rosana tampoco quería seguir encerrada allí. El ambiente reducido y la mezcla de su aroma con la tensión la tenían al borde 

11:22 

Capítulo 1175 

de perder la cabeza, y ahora que había hecho el ridículo, su único deseo era salir de ahí cuanto antes

Dionisio miró a la secretaria

-Llévala a pasear un rato

La secretaria suspiró aliviada, feliz de poder salir también de la sala antes de que el jefe le dirigiera alguna palabra dura

Rosana, con la vergüenza todavía pintada en la cara, salió rápidamente

Caminando junto a la secretaria, le preguntó en voz baja

-¿Siempre es tan serio cuando trabaja

La secretaria dudó un poco antes de responder

-Nuestro jefe es muy dedicado cuando se trata del trabajo, pero fuera de eso es buena onda

No podía hablar mal del jefe delante de la novia, así que optó por cambiar de tema enseguida

-Señorita Lines, ¿hay algún lugar especial al que le gustaría ir

Rosana miró a su alrededor, sintiendo de nuevo esa sensación extraña, como si alguien la estuviera observando

Carraspeó, tratando de sonar casual

-No tengo nada en mente, así que lo que tú digas. Me gustaría conocer los lugares a los que él suele ir cuando está en la empresa. Tengo curiosidad por verlos

La secretaria la entendió de inmediato

-El lugar al que más viene el jefe es la sala de juntas, pero también puedo llevarla a conocer otras áreas del grupo. De hecho, hay una exhibición de productos de la Empresa del Arce, podríamos empezar por ahí

Renacer sin Perdón

Renacer sin Perdón

Score 9.9
Status: Ongoing Type:
Renacer sin Perdon

Comment

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Options

not work with dark mode
Reset