CAPÍTULO 15
Suzana Ferrari:
Estoy viviendo algunos momentos complicados, ya he comenzado mi prenatal, descubrí que
tengo presión alta debido al estrés que estoy pasando porque Daniel está convirtiendo mi
vida en un infierno, él no acepta nuestra separación, no importa lo que le diga de que no
volveremos a salir, él dice que está dispuesto a asumir a mi hijo solo para obtener mi perdón.
Dios mío, está siendo muy difícil alejarme de él. Nunca pensé que una ruptura podría causar tantos problemas, por eso me prometí a mí misma no volver a salir en mi vida, olvidarlo. No
es para mí. Mi familia me está apoyando en todo y mis amigas también, incluso Lilian, que
está lejos me apoya con palabras de aliento, diciendo que seré una gran madre y que todo saldrá bien, incluso estará presente en la boda de Tayná.
Echo de menos a todas mis amigas reunidas, Tayná ha pasado por un proceso muy
complicado últimamente, pero todo se está resolviendo y pronto comenzaremos los
preparativos para su boda. Vitor todavía está enfadado conmigo, quiere saber quién es el padre del bebé, incluso pidió características para buscar, pero le dije que no importa porque criaré a mi hijo sola, así que se enojó una vez más. ¡Maldición! Todo es realmente muy
complicado con mi hermano. Mi familia ni siquiera sospecha que Daniel me está
persiguiendo; no quiero preocuparlos más de lo que ya están. Incluso Daniel está difundiendo
rumores sobre el padre de mi bebé, pero eso no es verdad, Diana ha negado esa historia
varias veces, pero él sigue adelante. Estoy tratando de resolver esta situación por mí misma
evitando que Daniel se acerque a mí, incluso he instalado una puerta con rejas en la galería
para que cualquier persona que quiera entrar tenga que pedir permiso, mis amigas lo
encuentran absurdo, piensan que debería hablar con mi familia y contarles todo lo que está
sucediendo, pero tienen más cosas que hacer.
Ya tienen suficiente preocupación debido a mi embarazo. Últimamente estoy tratando de aferrarme a las cosas positivas, pensando que todo saldrá bien y que pronto mi bebé nacerá y toda mi atención se centrará en él o ella. Ya he hecho tres ultrasonidos, pero aún no podemos determinar el sexo. El bebé no está cooperando, pero siento que es una niña incluso sin tener confirmación todavía, seguramente será igual que la que aparece en mis sueños, una niña de cabello rizado y piel morena, simplemente hermosa, estoy contando los días para tenerla en mis brazos. Hoy, cuando salí de la galería para ir a una cita, me sorprendió la forma en que Daniel se acercó a mí, parecía trastornado y eso no es normal, por supuesto tuvimos una discusión, me sorprendí cuando Caio apareció y me defendió, aunque le dije que no necesitaba su ayuda, hace mucho tiempo que no lo veo. La última vez fue en la galería cuando quería hacer una prueba de ADN.
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Estoy muy enojada por lo que me hizo, aunque me haya llevado al hospital, no borra el
resentimiento que siento en mi corazón. Fue muy cruel conmigo, incluso cuando vino a hablar
sobre la prueba de ADN, su arrogancia estaba por las nubes, me enfadé y rompí la prueba de
ADN, sé que podría haberle demostrado sobre nuestro hijo, pero sabiendo que él es un
desgraciado que hizo todo lo posible para deshacerse de la situación, prefiero mantenerlo
alejado. Así que tenía que alejarlo, aunque algo dentro de mí quiera pedirle que se quede, sé
que la ira me está consumiendo y no me permite ver las cosas claramente, pero no puedo ser
diferente. Siempre he tenido una personalidad fuerte y eso difícilmente cambiará, incluso mis
amigas me están diciendo que sea más flexible y piense en mi hijo. Ahora estoy frente a Vitor,
no sabía que mi padre lo iba a enviar aquí. Creo que después de lo que pasó ya no podré
ocultar lo que Daniel está haciendo, tendré que contárselo a mi familia, es decir, llevarles otro
problema.
-¿Qué hace Caio aquí? -pregunta acercándose a mí.
Respiro profundamente antes de responder.
-Él me ayudó -confieso.
Vitor arquea una ceja y frunce los labios, sé que a mi hermano no le gusta él.
Lo veo sentarse en el borde de mi cama y sonreír de lado.
-¿Qué está pasando, Suzana? -pregunta.
Bajo mi mirada, pero mi hermano se acerca a mí y me hace mirarlo.
-¿Qué está pasando, Suzana? -pregunta nuevamente.
Trago saliva bajo su mirada, Vitor sabe intimidar cuando quiere.
-Daniel me está persiguiendo -respondo.
Mi hermano se levanta rápidamente, sé que está a punto de perder por completo su calma.
-¿Por qué no lo dijiste? -pregunta irritado.
Mi voz sale entrecortada, si algo me ha dejado este embarazo es más sensible.
-No quería traer más problemas, mira toda la confusión que ya he causado, Vitor, estoy volviendo locos a todos -hablo, Veo balancear la cabeza en señal negativa.
-Suzan, tú eres mi hermana, no estás trayendo problemas -responde.
Sonrío sin humor.
-¡Cómo no, Vítor! -hablo alterada-. Diana necesita resolver su vida, pero está preocupada
por mí; papá es otro que vive preocupado por mi situación y tú en lugar de entender que mi
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hijo no necesita un padre, sigues cuestionándome sobre eso -hablo-. Mira las innumerables preocupaciones que ustedes tienen, Diana ya debía haberse ido, pero solo está aquí por mi causa, incluso estoy impidiendo que sucedan cosas en la vida de mi hermana. Sin contar que Stefany viene a casa varias veces solo para asegurarse de que puedo lidiar con esta situación, piensas que no sé qué todos sienten lástima por mí, crees que no podré cuidar de mi hijo sola, pero lo haré, Vítor, aunque ustedes no lo crean, nadie necesita tratarme como una muñeca de porcelana porque no es necesario–concluyo con voz baja.
Mi hermano me mira fijamente a los ojos, luego sonríe ligeramente y comienza a secar mis lágrimas.
-Tenía toda la vida planeada. Mira ahora en qué se convirtió todo, ni siquiera ustedes creen que puedo cuidar de mi hijo, ni ustedes -hablo con dificultad.
Vítor me abraza fuerte, tanto que lo necesitaba.
-No quería traer más problemas a nuestra familia, no quería, pero no me trates como a una niña o a una incapaz de hacer frente a la responsabilidad de criar a un niño, Vítor, porque no lo soy hablo entre las lágrimas que no dejan de caer.
Mi hermano me mira fijamente a los ojos mientras sonríe.
-Suzan, te amo. Sé que he cometido muchos errores al estar alejado de ti durante todos
estos meses, disculpa por mi ausencia y por hacerte sentir culpable… -no lo dejo terminar
sus palabras.
-Soy culpable, Vítor, mira todo lo que está sucediendo… -él cierra mi boca con su mano.
-No estás retrasando nuestras vidas, por supuesto que nos preocupamos por ti, pero eso es porque somos tu familia, y la familia se preocupa incluso cuando estamos peleados- responde Vítor-. Ya no volveré a preguntar quién es el padre de tu bebé, dejaremos que la
vida siga su curso, si algún día quieres contarlo, estaré aquí para escucharte porque sé que tú
sabes quién es y no quieres decírmelo. Tal vez sea un gran hijo de puta y por eso lo ocultas, sin embargo, sé que eres capaz. Sí podrás cuidar a este niño, disculpa por presionarte para saber quién fue el imbécil que hizo este hijo, pero creo que mi hermana no lo necesitará
responde.
Sé que Vítor está como un loco buscando al padre de mi bebé, pero sonrío ligeramente al saber que finalmente no seré cuestionada más sobre este hecho.
-Solo quiero seguir adelante con mi hijo, eso es todo -respondo.
Mi hermano vuelve a abrazarme.
-Y seguirás, sé que podrás cuidarlo y dejaremos al padre de este bebé fuera de nuestras
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vidas.
-Gracias. -respondo.
Se aleja y respira profundamente.
-Ahora, respecto a Daniel, hablaré con Rafael para que tome medidas de protección contra él
y… -No permito que termine sus palabras.
-¿Estás seguro de que eso es necesario? -pregunto.
-Si él te está persiguiendo, es sin duda necesario, ¿o prefieres que yo me encargue de la
situación con él? -pregunta.
Abro mis ojos sorprendida, conociendo a mi hermano, eso nunca acabaría bien.
-No, déjalo, que la justicia se encargue de esta situación.
Vítor sonríe ampliamente.
-Sí, ella se encargará -responde riendo.
-Suzan, ¿cómo estás? -Diana entra en la habitación preocupada.
Ella me abraza.
-Estoy bien. No fue nada importante – aseguro.
-Cuando papá informó que estabas en el hospital, traté de llegar lo más rápido posible, gracias a Dios que Vítor ya está aquí -responde abrazando a mi hermano.
-Daniel la está persiguiendo -explica Vítor.
Diana abre la boca sorprendida por la información.
-Tú dijiste que todo estaba bien -responde nerviosa.
Asiento con la cabeza en señal positiva.
-Sí, pero tenía miedo de traer más problemas a ustedes.
Diana está lista para regañarme, como ya imagino, pero Vítor se adelanta a hablar.
-Ya hablé con ella, Diana, presentaremos una medida de protección contra Daniel y el
problema se resolverá responde él.
Mi hermana respira aliviada.
-Perfecto, entonces ahora cuéntanos, ¿cómo está tu bebé? -pregunta.
-El médico dijo que todo está bien. – respondo.
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Mis hermanos sonrien ampliamente.
Permanezco algunas horas más en el hospital hasta recibir el alta. Es horrible tener
problemas durante el embarazo, pero sé que cuando mi bebé nazca, todo se arreglará.
Cuando salgo del hospital, miro a mi alrededor pensando que tal vez Caio no se haya ido, sé
que suena contradictorio cuando yo misma quiero que esté lejos de mí, pero, en el fondo, creol que lo extraño. Incluso en medio de tantas heridas y enojos, todavía pienso en mi amigo de la
infancia. Y creo que eso no es bueno.
