apítulo 13-1
Aullando, Estaba aullando. Estaba en mi forma de lobo, de pie en una colina mirando la vista más espectacular que habia visto y estoy aullando a la luna. Hay tantas cosas que desentrañar en esa frase que me
marcan. Pero de una buena manera. El aullido se desvaneció y traté de mirarme a mi misma. Estaba mucho
más firme sobre mis palas y me retorci v giré en un intento de ver mi cuerpo. Escuché un sonido de resoplido
y miré al lobo de Finlay, y juro que se estaba tiendo. Su lobo de color arena es tan atractivo como su forma
humana. Estoy agradecida de que haya estado conmigo durante la noche. Es un buen Alfa. Se levantó y trotó
hacia mi, moviendo la cabeza en un gesto que pensé significaba que queria que lo siguiera. Asenti y él tomó un pequeño sendero que bajaba hacia el tio. Caminó hasta in orilla y miró hacia abajo, Curiosa, lo seguí y
mire hacia abajo. El agua estaba casi completamente quieta y el cielo nocturno oscuro la convertia en un
espejo. Pude verme y me sorprendi. Ni siquiera mi madre, de quien heredé mi cabello rojo, tenia un lobo que se pareciera al mio. El mismo color rojo de mi cabello cubre la mayor parte de mi pelaje. Pero mi cara, patas y
el final de mi cola se desvanecen en un color crema. Mis ojos verdes se ven iguales. Soy grande, pero ya lo habia deducido, casi tan alta como Finlay. Tuve que dar algunos saltos solo para expresar la alegria que senti a en ese momento. De nuevo, podria jurar que Finlay se estaba riendo de mi. Pero está bien. Estaba en mi forma de lobo y estaba rebosante de alegria y asombro. Después de un momento, Finlay apuntó con su nariz hacia el sendero por el que habiamos venido. Entendi que era hora de regresar y asenti. Estaba feliz de caminar tranquilamente a su lado a través del bosque. La noche podria haber sido corta, pero aún necesitaba averiguar cómo volver a mi cuerpo humano. Llegamos al lugar donde me transformé y Finlay volvió a su forma humana y se puso unos pantalones cortos. Me sonrió y levantó la manta que aún estaba en el suelo. Capté el mensaje y lo dejé cubrir mi cuerpo. Lo miré, no tenía idea de qué hacer ahora. Parecía entender.
-Para cambiar de vuelta, solo necesitas concentrarte en tu yo humano, en la sensación de ser humano- me dijo. Lo hizo sonar fácil, asi que traté de concentrarme en mi lado humano. Senti los mismos cosquilleos que senti cuando tomé mi forma de lobo, pero esta vez no hubo dolor. Y entonces estaba acostada boca abajo bajo la manta, completamente desnuda.
-Ahi lo tienes. Sabia que serías natural- dijo Finlay con una sonrisa.
-Gracias. Eso fue… empecé a decir, pero no sabía cómo terminar la frase.
-Si, así se siente la primera vez coincidió Finlay mientras me entregaba mi ropa y, como un caballero, se dio la vuelta para dejarme vestir. Estaba un poco tambaleante sobre mis piernas, pero encontré mi equilibrio. Cuando estuve vestida, camine hacia Finlay y le di un golpecito en el hombro. Se giró con una sonrisa.
-Gracias- le dije. Gracias por guiarme en esto y no abandonarme.
-Fue un honor- me dijo y pude notar que lo decía en serio. Hablamos mientras caminábamos de regresot hacia la fogata. Encontré el mundo ligeramente diferente. Mis sentidos eran más agudos de lo que habian. sido. Matilda estaba sentada en su lugar y los cachorros se habian calmado y estaban durmiendo en mantas extendidas o sentados, jugando. Cuando Cadence nos vio venir, corrió hacia nosotros.
-¡Amie! ¿Cómo fue? ¿Fue tan divertido como pensabas? ¿Qué hiciste? ¿Corriste? ¿Cazaste? Eras tan grande, apuesto a que serías increible cazando. Mi papá siempre mata conejos para mi mamá y me enseñará cómo hacerlo cuando me transforme por primera vez disparó sus preguntas en una secuencia rápida y tuve que
reir.
Cálmate, pequeño. Deja que Amie diga algo dijo Finlay mientras se reia.
Lo siento, Alfa- dijo el cachorro. Pero aún me miraba con ojos brillantes.
-¿Qué tal si nos sentamos y te cuento todo?– le dije y se vela tan feliz que me hizo sonreir tan grande como él. -Gracias de nuevo. Estoy agotada de tanto transformarme por esta noche, así que ve y diviértete. Yo
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descansaré junto al furgo- le dije a Finlay. El dudó y parecia que queria objetar.
-Vamos, yo la cuidaré- dijo Matilda antes de que tuviera la oportunidad.
Capítulo 13-2
Está bien accedió y luego se dirigió de nuevo hacia el bosque. Me senté con Cadence y comencé a contarle sobre mi primera transformación. Todavia estaba asombrada de tener un lobo. Ahora podia sentirla dentro de mi. Como una sombra con emociones. Matilda se acercó a la mesa con la comida sobrante y regresó con un
plato lleno y me lo entregó. No me habia dado cuenta de lo hambrienta que estaba. Después de haber respondido la mayoría de las preguntas de Cadence, me lancé a la comida.
Esto es increible, gracias- le dije a Matilda entre bocados. Ella se ríó,
-Transformarse siempre te da hambre y diez veces más cuando es la primera vez–me explicó. Cadence se
habia unido a sus amigos, y podia escucharlo contarles lo que le habia dicho.
-Eres muy a
abierta sobre la transformación con los jóvenes le dije. Ella asintió.
-¿He deducido que no era asi en tu antigua manada?– preguntó.
-No, se mantenia en secreto. Nunca lo cuestioné, pero ahora no entiendo por qué. Habría sido bueno saber qué esperar- le dije. Ella murmuró.
-Algunas manadas les gusta complicar las cosas más de lo que son. Nosotros no somos asi. Una manada sigue
el ejemplo de su Alfa y Finlay es directo y no le gustan los secretos si no tienen un propósito. Es por eso que lo segui aqui. Siempre pensé que los dioses confundieron a él y a su hermano en cuanto al orden de nacimiento. En mi humilde opinión, siempre fue claro que Finlay era el Alfa natural. Cuando su hermano tomó el control de nuestra antigua manada y Finlay eligió no pelear, fue una decisión fácil. Fue lo mismo para
la mayoria de nosotros. No sé qué estaba pensando mi hermana al quedarse atrás. Puedo entender amar a tus hijos por igual, pero no debería cegarte para ver la verdad- dijo Matilda.
-Estoy impresionada por todos ustedes. Se necesita valor para hacer lo que hicieron le dije. Matilda se
encogió de hombros.
-Casi tanto como se necesita para dejar atrás tu manada y crear una nueva vida para ti misma replicó. Le
sonrel.
-Solo tenia que pensar en mi misma. Ustedes tienen cachorros y familias y personas vulnerables entret
ustedes señalé.
-Eso teníamos, eso es lo que compone una manada. Se necesita de todos nosotros para crear una manada. equilibrada. Jason, el hermano de Finlay, no lo vela así. Queria una manada con guerreros fuertes- me dijo
Matilda.
-Veamos cómo le gusta cuando todos los guerreros fuertes tengan que averiguar quién va a limpiar los baños.
o cocinar la cena dije. Matilda se rió.
-Lo entiendes. Sonaba complacida.
-Mi papá siempre decía que las tareas más importantes en la manada eran las que nadie piensa hasta que nadie las hace. Limpiar, cocinar, ordenar suministros y asi le dije. Habia pasado mucho tiempo desde que
hablé de mi padre y me dolió el corazón.
-Parece un buen hombre.
-Lo era, el mejor Beta. Al menos asi me parecia a mi.
-Finlay nos ha dicho que no te presionemos, y no lo haré. Pero diré que esta manada necesita lobos como tú. Viéndote como lobo, sabiendo que has crecido en una familia Beta, ahora puedo, con absoluta confianza, decirte que eres un lobo fuerte. Perteneces al nivel superior de la manada, y tienes la experiencia.
lo que voy a decir Necesitamos eso. Eso es todo lo que
me dijo. Le sonrel.
-Gracias por decirlo, Caimos en silencio. Era cómodo sentarse y mirar las llamas, escuchar los sonidos del bosque, de la manada que celebraba la luna llena, Sabla que mi transformación cambiaba las cosas. Había sido solitario vivir sin una manada antes. Pero habla sido posible. Pero ahora. Ya podia sentir la inquietud de mi lobo al estar sola. Ella encontraba consuelo en estar rodeada por una manada en la que sentia confianza. Pero aún estaba inquieta por no ser parte de ella. Casi me habia convencido de que debia quedarme en la manada antes. Pero ahora, ahora no vela otra opción. No me arrepentia en lo más minimo. Claro, tendría que despedirme de mis amigos, pero ya habla comenzado a hacer nuevos amigos en la manada. Y aquí podia transformarme y correr por el bosque sin tener que mirar por encima del hombro. Luego estaba Finlay. Tenia que admitir que podría tener un pequeño enamoramiento con él. Pero, ¿alguien podria culparme por eso? ¿ Quién no se enamoraria de un Alfa alto y atractivo que era tan dulce como fuerte? Sabia que no pasaría nada entre nosotros. El no habia encontrado a su verdadera pareja, y yo si. Pero aún asi, era un buen Alfa, sabia que no tendría problemas en unirme a su manada.