Capítulo 73 Un lanzamiento exitoso
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En contraste con la efusividad de los demás asistentes, Natanael se mantenía imperturbable. Estela volvió a dirigir su mirada hacia Cecilia y declaró:
-Aunque mi primer amor y yo tomamos caminos separados y no llegamos a casarnos, confío en que al final estaremos juntos.
Estas palabras fueron, en esencia, una advertencia velada para Cecilia.
Cuando comenzó el acompañamiento, la nueva canción de Estela, «Rayo de luz en la oscuridad», inundó el ambiente con su melodía elegante y conmovedora. Por alguna razón inexplicable, mientras Cecilia la escuchaba, le resultaba extrañamente familiar, aunque no lograba recordar dónde la había oído antes.
-La melodía es bastante buena. Es una lástima que haya malogrado la canción–comentó Natanael en voz baja desde su asiento.
Cecilia, que seguía intentando recordar dónde había escuchado esa melodía, se vio interrumpida por las palabras de Natanael. A pesar de que Estela había iniciado su carrera como cantante, su voz no era realmente excepcional.
Natanael miró a Cecilia y le dijo:
-Recuerdo que a ti también te gustaba cantar.
De no haberlo mencionado, Cecilia casi lo habría olvidado. Quizás por influencia de su madre, Paula, Cecilia tenía un gran sentido musical desde muy pequeña. Sin embargo, padecía problemas de audición, una condición perjudicial en la industria musical.
En una ocasión, Natanael la encontró tarareando una canción y quedó impresionado por lo bien
que sonaba. Pensó que sin duda se haría famosa si la cantara profesionalmente.
Cecilia no esperaba que él aún recordara su afición por el canto. En aquella época, lo que más detestaba eran los ruidos en casa.
-¿Ah, si? No lo recuerdo -respondió ella.
Bajo la tenue iluminación, Natanael le lanzó una mirada penetrante y le preguntó:
-¿Recuerdas que yo fui el primer amor de Estela?
El motivo de su presencia esta vez era observar cómo se comportaba Cecilia al enfrentarse a Estela. No creía que Cecilia se mostrara indiferente ante las palabras de la cantante.
-Fuiste tú quien me arrebató de sus garras -añadió Natanael, pronunciando cada palabra con deliberada lentitud mientras la miraba fijamente.
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Capitulo 73 Un lanzamiento exitoso
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«¡Qué absurdo!», pensó Cecilia. En realidad, fue él quien había roto primero con Estela. Solo después de su separación, las familias de Natanael y Cecilia comenzaron a discutir los arreglos matrimoniales.
Tan descarada distorsión de la verdad despertó una oleada de indignación en el corazón de Cecilia, pero se esforzó por no dejarla traslucir.
-¿Es eso cierto? Puede que tenga problemas de oído, pero mi vista está perfectamente. ¿Tan escaso era mi encanto en el pasado que tenía que competir con ella por un hombre? – replicó con sarcasmo.
La expresión de Natanael se tornó ligeramente rígida.
-¿Crees que otros hombres son mejores que yo? -inquirió con un deje de molestia en su
VOZ.
De no haber estado rodeados de gente, sin duda habría exigido una explicación exhaustiva. Percibiendo que su enojo iba en aumento, Cecilia optó por no insistir.
-Solo estaba haciendo una comparación, señor Rotela. No le dé más vueltas -zanjó ella.
¿Cómo era posible que Natanael no le diera vueltas? Desde que Cecilia había regresado, era como si se hubiera convertido en una persona completamente diferente.
Quiso decir algo más, pero Estela ya había concluido su interpretación. Aparte de haber escuchado las dos primeras líneas de la canción, Cecilia no había prestado atención al resto.
Cuando la melodía terminó, todos los presentes prorrumpieron en aplausos. Aunque el canto de Estela era pasable, la melodía de esta nueva canción era realmente agradable al oído, notablemente superior a todas las que Estela había interpretado antes. Algunos vaticinaron que la canción se haría famosa en cuanto saliera al mercado.
El lanzamiento de la nueva canción de Estela fue todo un éxito. Rodeada por los halagos de la multitud, la mirada de Estela se posó inevitablemente en Natanael. En sus ojos se reflejaba un sentimiento de satisfacción. Por fin había demostrado una vez más que no tenía nada que envidiar a Cecilia.
Cuando los medios de comunicación se retiraron, Estela se dirigió directamente a Natanael. Frente a Cecilia, los ojos de Estela rezumaban orgullo.
-Natanael, sabía que vendrías. Nunca te pierdes ninguno de mis momentos importantes declaró con voz melosa.
—
Mientras Cecilia observaba cómo se desarrollaba esta escena, no podía expresar sus sentimientos con palabras. Al oír las palabras de Estela, los compañeros que aún permanecían en el lugar supusieron, naturalmente, que Natanael había acudido en busca de
ella.
