Capítulo 22
-Entonces, señorita, ¿está fingiendo ser débil para atrapar a un tigre?
-Así es -Esther respondió sin titubear y continuó-: Primero hay que evitar alertar al enemigo, la evidencia debe recopilarse paso a paso. Su forma de apropiarse de los activos de la empresa ya afectó los intereses de los accionistas. Cuando tengamos todas las pruebas y hayamos desmantelado su red de contactos dentro de la compañía, será el momento de su caída.
Ruth observó a Esther detenidamente, notando algo diferente en su mirada.
-Señorita Montoya… se ve distinta a como era antes.
La Esther de antes era gentil y virtuosa; aunque inteligente, jamás hubiera recurrido a estas tácticas del mundo empresarial.
Pero lo que Ruth acababa de escuchar tenía toda la lógica del mundo.
No pudo evitar sentir admiración por ella.
-Ferrer, has estado en la empresa durante varios años, mi padre te dio su apoyo en el pasado. Espero poder contar contigo ahora.
-Cuente conmigo, señorita Montoya, No permitiré que Francisco y la señora Montero dañen la empresa que el presidente Montoya nos dejó,
-Perfecto.
-Pero… -Ruth vaciló un momento antes de continuar-: Aunque Francisco se está excediendo, el Grupo De la Garza nos ha estado atacando sin piedad, especialmente hoy.
-¿Hoy?
Ruth asintió con preocupación.
-Justo hoy, el Grupo De la Garza retiró su inversión de varios proyectos del Grupo Montoya. Nos quedamos sin fondos suficientes, prácticamente estamos caminando en la cuerda floja. El departamento financiero ya comenzó la auditoria. Nuestros recursos solo alcanzarán para siete dias
Siete dias
Esther dejo escapar una tisa fria
Era evidente que Samuel buscaba venganza por lo de Anastasia, intentando forzarla a ceder.
-Hablando de dinero, necesito sollicitar un préstamo al banco.
Ruth truncio el ceño
–
« Un préstamo bancario? Es demasiado arriesgado, la verdad no lo recomendaría,
-Encuentra la manere. Necesitamos un préstamo de quinientos millones para resolver primero
01:26
Capitulo 22
el proyecto inmobiliario del que Samuel retiró su inversión. Después, yo me encargaré de conseguir más financiamiento.
-Señorita, estamos hablando de quinientos millones. El banco podría negarse, y también necesitamos fondos para otros proyectos.
-Prepárame un informe detallado. Te daré una respuesta en menos de siete días.
-Como usted diga.
Ruth respondió, aunque dudaba que Esther pudiera reunir semejante cantidad en tan poco
tiempo.
A menos que… la señorita cediera ante el presidente De la Garza.
Por la tarde, cuando Esther salió del Grupo Montoya, los vigilantes que Samuel había asignado para seguirla contactaron a Bianca, quien se encontraba en las oficinas del Grupo De la Garza.
Al recibir el mensaje, Bianca se dirigió nerviosa a la oficina presidencial.
Samuel ni siquiera levantó la vista cuando preguntó:
-¿Qué pasó? ¿Ya decidió someterse?
-La señorita Montoya después de salir de la empresa, se fue de compras.
-¿De compras?
Samuel alzó la mirada, frunciendo el ceño involuntariamente
¿Qué le pasa a esta Esther? ¿Perdió la razón?
La empresa enfrentando semejante crisis y ella con ánimo de ir de shopping.
-Presidente De la Garza
Samuel soltó una nisa cargada de desprecio.
-De verdad es una niña sin cerebro que solo sabe gastar dinero. Perfecto, ya que no quiere someterse, no tengo por qué ser misericordioso. Voy a apretar más fuerte, para que aprenda
las consecuencias de provocarme
-Pero presidente De la Garza, si su abuela se entera, no le va a parecer…
Samuel le lanzó una mirada gélica a Bianca
-Cuando Esthet se metió con Anastasia, debió imaginar su destino. Lo que estoy haciendo con ella ya es bastante considerado por respeto a mi abuela.
-Si presidente De la Garza
Bianca se retrabe lentamente cuando Samuel pareció recordar algo y la detuvo.
01.26
Capitulo 22
-¡Espera!
-¿Necesita algo más, presidente De la Garza?
-Si Esther viene a buscarme, dile que no tengo tiempo.
2/2