Capítulo 321 

Cynthia sintió pasar un momento de vergüenza por su rostro, pero al pensar en las enormes deudas médicas de su padre y la pesada responsabilidad de cuidarlo, se dio cuenta de que sola era incapaz de soportarlo. Así que descaradamente, obligó a Aurora a compartir las obligaciones que le correspondían. 

“Ahora que has vuelto a casa y te proclamas hija de la familia Chávez, entonces deberías asumir la responsabilidad de mantener al viejo.” 

Aurora sonrió inocentemente: “No he recibido ningún beneficio de la familia Chávez, pero cuando hay problemas, piensas en mí. No importa, siempre he sido generosa. Puedo ir al hospital a cuidar a tu papá. Pero, los gastos médicos y de cuidado los pagarás tú ¿Verdad?” 

Cynthia exclamó: “¿Por qué? Tú también debes pagar la mitad.” 

“Si quieres llevar las cuentas tan claras, entonces cuidemos al viejo entre las dos, un día cada 

una.” 

“Eso es…” Cynthia se mostró incómoda. 

Aurora se dirigió a madre, quien estaba a un lado: “Mamá, ¿Ves? ¿Esta es la buena hija que criaste? Mejor cuídate mucho, porque si llegas a envejecer, tu preciosa hija no querrá gastar dinero ni esfuerzo, y te dejará a tu suerte.” 

La mirada de reproche de Fabiola se dirigió hacia Cynthia, quien no tuvo más remedio que aceptar a regañadientes: “Está bien, nos turnaremos un día cada una.” 

Aurora le preguntó con una sonrisa desafiante: “Entonces, ¿Hoy quién va, tú o yo?” 

Cynthia, buscando evitarlo, dijo: “Tú.” 

“Está bien. Pero después no te arrepientas.” Dijo con una sonrisa radiante. 

Aurora llamó por teléfono a los guardias de seguridad del edificio para que ayudaran a llevar a Gabriel a su auto. Luego, lo llevó al hospital más caro. 

Como todavía no había un diagnóstico claro de la enfermedad de Gabriel y el hospital no había determinado un plan de tratamiento, Aurora le pagó simbólicamente mil pesos al hospital. 

El hombre pasó todo el día en la sala de emergencias, mientras Aurora, ajena a todo, disfrutó de la música afuera. 

Lo que nunca se imaginó, fue que se encontraría con Isaac. 

Él estaba reunido con Daniela, y ambos se dirigían sigilosamente hacia el final del pasillo. 

Movida por la curiosidad, los siguió discretamente. 

Al acercarse, vio a Isaac, desmejorado, intentando complacer a Daniela con voz baja. “Daniela, después de todo, te he visto crecer. Por favor, por cómo te traté en el pasado, esta vez 

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Capitulo 321 

tienes que ayudarme.” 

“Córdoba, no te preocupes. De cualquier manera, conseguiré que Salva firme el perdón.” 

“No será tan fácil. Por alguna razón, Salvador le tiene un cariño especial a Aurora, y ella me odia, a mí y a mi madre. Hará todo lo posible por evitar que Salvador nos perdone.” 

Daniela le aseguró con confianza: “Córdoba, tranquilo. Salva es amable con Aurora solo porque. es un hombre de negocios y los negocios son su prioridad. Ella le es útil, por eso la protege. Pero ahora es diferente, puedo ofrecerle a Salva más beneficios que Aurora, y además, seré su mujer. Él me escuchará.” 

Al escuchar las palabras de Daniela, el corazón de Aurora se llenó de pesar. 

Daniela estaba decidida a proteger a Isaac, y ella estaba en contra de Daniela. ¿A quién ayudaría Salvador? 

Probablemente elegiría ayudar a Daniela. Después de todo, en su vida anterior, lograron estar juntos y se convirtieron en familia, por lo que naturalmente, los sentimientos de Salvador se inclinarían hacia ella. 

Si Salvador también se unía a Daniela para obstaculizar su venganza, entonces su camino hacia la venganza enfrentaría el mayor de los obstáculos. 

Con el corazón cargado de preocupaciones, Aurora se alejó.. 

Gabriel fue sacado de la sala de emergencias alrededor de las cuatro de la tarde. 

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