Capítulo 214 

¿Cómo te atreves a coquetear con tu propio cuñado? Sus labios temblaron ferozmente. 

Aurora se acercó a ella, se inclinó y le susurró al oído: ¿Acaso no es esto lo que me enseñaste? ¿No fuiste tú quien coqueteó con mi esposo en aquel entonces?” 

Cynthia se puso pálida: “Tú…” 

Aurora continuó: “Mi cuñado no me rechazó, oh. Justo como cuando tu coqueteaste con mi esposo, él tampoco te rechazó.” 

Cynthia recordó de repente cómo, en aquel entonces, frente a Marina, había dicho algunas cosas para provocar a Isaac. Él no entendía su astucia, pero Marina sí fue herida profundamente por su indiferencia. 

En ese momento, como si el destino hubiera girado, ellas habían intercambiado sus roles. 

Pero Cynthia no era tan humilde o comprensiva como Marina, por lo que armó un escándalo en el acto: “Coqueteas con tu propio cuñado, no tienes vergüenza.” 

Y, sin más, le dio una bofetada a Aurora, quien tocándose la cara, retó a Isaac: “¿Acaso coqueteé contigo?” 

Isaac se quedó completamente confundido. 

Si lo que Aurora había hecho era inapropiado, ¿No eran las acciones previas de Cynthia aún más vergonzosas? 

Entonces, ¿Ella sabía que sus acciones previas lastimarían a su hermana, y aun así seguía acercándose a él de manera frenética? 

Por primera vez, Isaac sintió un distanciamiento de Cynthia. 

“Cynthia, deja de hacer escenas.” Dijo reprendiéndola. 

Cynthia, incrédula, abrió mucho los ojos, y las lágrimas de injusticia se acumularon: “¿Cómo puedes ponerte de su lado? Claramente, yo soy tu esposa.” 

Isaac, impaciente, dijo: “No he hecho nada con ella, estás pensando demasiado.” 

Palabras familiares, solo que esa vez, estaban dirigidas a Cynthia, quien estalló en un llanto desconsolado. 

“Isaac, ¿Ya no me amas? Sé que ya no soy tan bonita, ni tan exitosa como mi hermana. ¿Es por eso que me desprecias?” 

Al verla tan vulnerable, se sintió completamente desarmado. 

Suspirando, trató de consolarla: “Claro que te amo. Eres mi esposa, ¿A quién voy a amar si no a es a ti?” 

Aurora se burló: “Al principio, yo era tu esposa. Pero, ¿Acaso no terminaste enamorándote de tu 

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Capítulo 214 

cuñada?” 

Esa frase fue como un golpe directo a las acciones de Isaac como un hombre infiel, lo que aumentó la inseguridad de Cynthia, quien lloró aún más fuerte. 

Isaac, furioso, reprendió a Aurora: “¿Acaso lo haces a propósito? ¿Intentas deliberadamente causarme problemas con mi esposa?” 

“Como si un hombre despreciable como tú solo pudiera ser un tesoro para esta pobre enferma que no puede vivir sin ti.” Respondió con desdén. 

“Yo, una mujer exitosa y bella, ¿Cómo podría fijarme en alguien como tú?” 

“¡Tú…!” Isaac, luego de haber sido humillado, estaba furioso. 

En ese momento, las puertas de la sala de emergencias se abrieron. 

El doctor salió, y quitándose la mascarilla, dijo: “Logramos salvar las piernas del paciente, pero temo que podría quedar paralítico.” 

Al escuchar eso, Cynthia casi se desmayó de la tristeza. 

“¿Cómo pudo suceder algo así?” 

Aurora la ridiculizó: “Ahora que papá puede llegar a quedar paralítico, no solo no podrá cuidarte, sino que tendrás que cuidar de él. Parece que tus días serán difíciles, ¿Eh?” 

“No es solo mi padre. Tú también tienes la obligación de cuidarlo.” 

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