Capítulo 146
Ella, aunque derrotada, mantuvo su dignidad.
Y en cuanto a él, su victoria estaba lejos de ser honorable.
Conservó su fortuna, pero perdió su reputación.
Cuando Isaac volvió a casa, se desplomó en el sofá, agotado.
Penélope y Cynthia, al verlo más cansado que nunca, sintieron una profunda compasión por él.
“Isaac, pase lo que pase, finalmente te has liberado de Marina. Ahora eres libre.” Dijo su madre consolándolo con dulzura.
El optimismo de Penélope, la llevó a soñar despierta sobre un futuro brillante: “Isaac, una vez que tú y Marina estén divorciados, las amigas de mamá te presentarán de inmediato a las jóvenes más distinguidas de Ciudad de México. Con tus cualidades, no te faltarán chicas
buenas que se interesen en ti.
Si encuentras a una joven de buena familia, con el apoyo de tu suegra y tu suegro, tu carrera despegará. Tu papá dejará de menospreciarte y de favorecer a ese hijo ilegítimo.”
La expresión de Cynthia se tornó sombría. Discretamente, tiró de la manga de Isaac, mirándolo
con tristeza.
Isaac captó el mensaje y dijo: “Mamá, ¿Qué estás diciendo? Cynthia ya está esperando un hijo mío, tengo que asumir mi responsabilidad.”
Penélope lanzó una mirada fría hacia Cynthia.
“Isaac, sé que tú y Cynthia se aman de verdad, pero ahora su reputación ha sido manchada por Marina. Si insistes en casarte con ella, las críticas públicas te ahogarán. La gente en internet está siguiendo cada movimiento tuyo y de Cynthia. Te lo digo por tu bien… solo pienso en lo mejor para ti.”
Isaac se sumió en el silencio.
Cynthia sintió como si un hermoso sueño se hubiera desmoronado dentro de ella.
Había estado esperando que Isaac se divorciara de su hermana y creyó que, una vez libre, él se casaría con ella. Pero nunca imaginó que Penélope aún se opondría a que ella se uniera a la familia Córdoba.
Aunque trató de mantener una fachada de generosidad, sus ojos se llenaron de lágrimas, “Isaac, tu mamá tiene razón. Este no es el momento para nosotros. Por el bien de tu carrera, quizás deberíamos terminar.”
Cuanto más razonable se mostraba, más la adoraba Isaac.
“Voy a gastar dinero para eliminar las búsquedas negativas que me involucren con Cynthia. También compraré algunos escándalos para desviar la atención. El internet no tiene memoria,
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no pasará mucho tiempo antes de que todo esto se enfríe.”
Cynthia, protegida por Isaac, se sintió secretamente feliz.
Penélope, sin embargo, mostró una frialdad penetrante: “Tu matrimonio se discutirá más adelante.”
Al ver la firme oposición de Penélope a su entrada en la familia Córdoba, el ardiente corazón de Cynthia se enfrió.
Isaac soñaba con un final feliz, pero la realidad era cruel.
Después del juicio de divorcio, los escándalos sobre él y Cynthia se sucedieron uno tras otro. Era como si una plaga de langostas hubiera pasado, dejando desolación a su paso.
Los internautas virtuosos crearon chistes y parodias sobre Isaac y Cynthia. Muchos influencers recrearon en vivo las escenas de su romance secreto.
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