Capítulo 137 

Lamentablemente, había nacido en el infierno, sin derecho a entrar al cielo. 

Marina levantó la mano y tocó la puerta, la empleada llegó tarde y preguntó: “¿Quién es a estas horas?” 

Al abrir la puerta y ver a Marina, su rostro se llenó de sorpresa. 

“Señorita Marina, ¿Cómo es que ha venido?” 

Marina la empujó y entró por su cuenta. 

“¿Acaso no puedo visitar mi propia casa?” 

La empleada se quedó sin palabras. Pronto, tratando de buscar de ayuda, no pasó mucho antes de que Cynthia bajara lentamente las escaleras. 

“Mar, ¿Cómo es que de repente decidiste volver a casa?” Cynthia parecía estar de buen humor, su rostro estaba radiante, sin mostrar signo alguno de estar afectada por los rumores en 

internet. 

La mirada de Marina se fijó directamente en el vientre de su hermana, aunque estaba plano, supo que allí crecía un niño, quien no era nada más ni nada menos que el hijo de su esposo. 

“He decidido divorciarme de Isaac, pronto no tendré a dónde ir. Hermana, ¿Te importaría si me quedo aquí por un tiempo?” 

“No, no es posible.” Respondió Cynthia casi sin dudarlo. 

Marina replicó molesta: “También soy hija de la familia Chávez, ¿Por qué tú puedes vivir aquí y yo no?” 

“Sabes que a papá no le agradas. Si insistes en quedarte, él seguramente se enfermará de la molestia.” Contestó visiblemente alterada. 

Marina frunció el ceño, fingiendo desdicha: “¿Entonces qué se supone que haga? Si no tengo a dónde ir, simplemente no podré divorciarme.” 

Cynthia palideció, y agarrando la mano de su hermana con emoción, dijo: “¿No has estado deseando divorciarte de Isaac? Él finalmente accedió, si dejas pasar esta oportunidad, en el 

futuro tal vez no sea tan fácil.” 

Mirando como si disfrutara del drama, Marina dijo: “Hermana, ¿Tan ansiosa estás por tomar mi lugar?” 

Cynthia, sintiéndose culpable, respondió: “Mar, todo lo hago pensando en tu bienestar. Dijiste que, para forzar el divorcio, no te importó manchar la reputación de Isaac. La familia Córdoba probablemente ahora te odia a muerte. Si no te divorcias, ¿Crees que te aceptarán?” 

Luego, dando un suspiro, añadió: “¿Qué tiene que ver tu divorcio con que yo tome tu lugar?” 

Capitulo 137 

“Tranquila, definitivamente me divorciaré de Isaac.” 

Al escuchar eso, Cynthia obviamente se relajó. 

“Pero, si no tengo dónde vivir, por ahora no quiero divorciarme.” Dijo Marina de repente. 

Cynthia, incapaz de ocultar su desesperación, dijo: “Hermana, inmediatamente te buscaré una 

casa.” 

Cynthia tomó su celular y salió. No mucho después, volvió radiante. 

“Mar, un amigo mío está dispuesto a ofrecerte su villa en las afueras para que te quedes por un tiempo. ¿Puedes mudarte esta noche?” 

“¿Es en la zona este?” 

“¿Cómo lo sabes?” 

“¿Es Villa Palmas Doradas?” 

Cynthia se quedó pálida, 

“¿lsaac usó los bienes del matrimonio para comprarte esa casa?” Preguntó ridiculizándola. 

“¿Cómo lo supiste?” Preguntó Cynthia tragando saliva. 

Marina no le prestó atención. 

Ella tenía todas las pruebas de los bienes transferidos por Isaac durante el matrimonio. 

Cynthia, temerosa, preguntó: “¿Cuál es tu verdadero propósito por el que viniste el día de hoy?” 

“Solo quería ver cuánto queda de nuestro vinculo como hermanas.” Respondió mirándola con 

sorna. 

En ese momento, una sombra de vergüenza cruzó los ojos de Cynthia. 

Marina le había donado un riñón, pero ahora que ella se estaba divorciando, se negaba a ofrecerle un lugar para quedarse, era claro que para ella, efectivamente ya no significaba nada. “Mar, si quieres volver a vivir aquí, no es imposible…” Cynthia intentó recuperarse, “pero necesitas mejorar tu actitud y tenemos que llevarnos bien.” 

Mirándola como si fuera un chiste, Marina rio a carcajadas y dijo: “¿Realmente piensas que quiero volver a vivir aquí?” 

Cynthia la miró, sin entender. 

“Considerando tu ‘excepcional desempeño‘ esta noche, he decidido hacer un esfuerzo y darle otra oportunidad a mi matrimonio con Isaac“. Dijo sin rodeos. 

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