Capítulo 126
Retrocedí dos pasos, observando detenidamente a Camilo.
Camilo, con total naturalidad, me dejó mirarlo. “¿Qué tal?”
Su rostro siempre había sido serio.
El traje negro hacía aún más evidente su distanciamiento.
Y la corbata de color azul profundo añadía un aire misterioso y melancólico.
Le di un pulgar hacia arriba: “Te ves bien.”
Camilo claramente también estaba satisfecho: “Justo voy a una reunión para discutir una colaboración. Si dices que me veo bien, ¿entonces no me cambio?”
Estuve de acuerdo: “Está bien.”
Cuando Camilo ya estaba casi en la puerta, se detuvo de repente y se volvió hacia mí: “La secretaria debería volver pronto para informarte sobre quién será el responsable de tus obras en el futuro.”
Apenas ayer me dijeron que casi habían terminado de contratar al personal.
¿Y hoy ya alguien se comunicará directamente conmigo?
Me sorprendió un poco la eficiencia de su empresa.
De todos modos, asenti: “Entendido.”
Después de que Camilo se fue, regresé a mi lugar y me concentré en dibujar el boceto.
Camilo estaba sentado en la sala de estar, frente a Ricardo.
La empresa necesitaba colaborar con Ricardo en algunos negocios.
Y aún…
No se encontraba ninguna otra empresa que pudiera reemplazarlo.
Ricardo observaba la corbata de Camilo, con una expresión bastante desagradable.
Camilo notó la mirada de Ricardo. Su rostro permanecía impasible, pero su voz fría esta vez se
tiñó con un matiz de sonrisa.
Preguntó: “¿Te gusta? Ofelia me la regaló.”
Ricardo se obligó a mirar hacia otro lado.
Entonces…
Ofelia realmente no buscaba reconciliación.
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Capitulo 126
¡Ahora realmente le daba igual lo que él sintiera!
Quizás, ya no lo amaba…
Ese pensamiento cruzó por la mente de Ricardo, llenándolo de pánico.
Pero aun así, respondió con desdén: “El gusto de mi exesposa es, de hecho, bastante bueno.”
“Cuando aún estábamos casados, ella elegía la ropa para Benjamín y para mí.”
No sabía por qué, pero Ricardo quería hacerle saber a Camilo que Ofelia era mejor con él que con Camilo.
Camilo, con una sonrisa en los labios, dijo: “Ya veo, entonces también la dejaré que me ayude.a elegir qué ponerme todos los días.”
“Últimamente, me preocupaba no tener a quién pedirle consejo sobre mi vestimenta.”
Actuaba como si su relación con Ofelia ya fuera muy cercana.
Ricardo apretó los puños sin darse cuenta y preguntó casualmente: “¿Te interesa ella?”
Camilo no respondió.
Para Ricardo, ese silencio era como una confirmación.
Su miedo creció exponencialmente.
Camilo era atractivo y tenía una buena situación…
Si realmente decidiera elegir a Ofelia, entonces, con el paso del tiempo, ella terminaría enamorándose de Camilo.
Y lo olvidaría por completo.
Sin pensarlo, Ricardo dijo: “Pero ella estuvo casada.”
De alguna manera sintió que, al decir eso, Camilo empezaría a despreciar a Ofelia.
Y entonces Camilo ya no consideraría casarse con Ofelia.
Así, Ofelia nunca encontraría a alguien mejor que él….
No importa con quién estuviera en el futuro, siempre pensarían que él fue el mejor.
Y entonces, ella lamentaría haberse divorciado de él.
Camilo observaba con interés la expresión de Ricardo: “¿Importa eso?”
Ricardo añadió: “¡Ella tiene un hijo conmigo!”
“Cuando realmente te gusta alguien, no te fijas en esas cosas.” Camilo explicó con calma: “Solo lamentas no haber llegado a su vida más temprano cuando otros mencionan su pasado.”
Viendo que Camilo seguía sin mostrar desinterés tras llegar a ese punto, Ricardo continuó: “Pero ella durmió con otro hombre mientras estaba casada.”
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