Rosana notó que debajo de los ojos de Dionisio había unas ojeras azuladas, señal clara de que no había dormido bien en los últimos días.
Sin embargo, cada vez que ella le mandaba mensajes, él nunca mencionaba nada al respecto.
Rosana fue directa:
-¿Qué necesitas que haga?
Dionisio se acercó hasta quedar frente a ella:
-Ahora la opinión pública ya cambió de dirección, incluso se está revirtiendo. Este es el mejor momento para actuar.
Rosana asintió:
-De acuerdo.
Óscar se levantó de su asiento y dijo:
-Entonces, pues vámonos.
Rosana miró a Dionisio:
-¿A dónde vamos?
-A la fábrica -respondió él sin rodeos.
En ese instante, Rosana entendió perfectamente a qué se refería. Solo asintió de nuevo y lo siguió.
En cuanto subieron al carro, Dionisio la miró de reojo y le preguntó:
-Escuché que le sugeriste a Sara cancelar la inversión con la empresa PZ, ¿verdad?
Así es. Supongo que fue Javier quien se los contó, ¿no?
Rosana sabía bien la relación entre Sara y Javier; tratándose de una inversión tan grande, no era raro que Javier estuviera enterado.
Dionisio continuó:
-Yo también investigué un poco. Resulta que no son pocas las empresas que tienen acuerdos con PZ. De hecho, muchas señoras de la alta sociedad han firmado ese contrato de inversión de altos rendimientos con ellos. Hasta ahora, ninguno de los contratos ha tenido problemas, y cada mes depositan las ganancias puntualmente en las cuentas de las inversionistas. Óscar, que iba en el asiento del copiloto, se giró hacia atrás para añadir:
-Fui a preguntarle a mi mamá. Me contó que muchas de sus amigas también cayeron en eso, todas firmaron el mismo
contrato de inversión con PZ.
Rosana soltó un suspiro, resignada:
-¿No les parece que esto huele a estafa? Ya han salido un montón de trampas así antes: te prometen el cielo y al final se largan con todo el dinero ajeno.
Óscar trató de explicar:
-La diferencia es que PZ tiene buena fachada. No es como esos fraudes piramidales de P2P que han tronado antes. PZ es una empresa internacional, tiene registrados varios proyectos, incluso desarrollos en inteligencia artificial. Todo eso se puede comprobar.
Rosana negó con la cabeza, sintiendo impotencia:
-Por eso mismo tanta gente está convencida de que no hay peligro.
Dionisio la miró con atención:
-Entonces, ¿por qué tú estás tan segura de que ese contrato de inversión de PZ es una estafa?
Rosana se quedó helada. No podía decirle la verdad, que en su vida pasada la empresa PZ había caído en bancarrota,
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arrastrando a cientos de familias que lo perdieron todo.
Tras meditarlo unos segundos, contestó:
-Es que la mamá de Leonor trabaja en PZ, así que desde hace tiempo desconfío de esa empresa. Cuando escuché a Sara hablar de la inversión, senti que era todavía menos confiable.
Dionisio le apretó la mano con fuerza:
-Después de investigar, noté que PZ no se enfoca en sus proyectos, más bien busa acercarse a estas señoras y convencerlas de invertir en contratos de altos intereses. Desde ahí ya se ve raro.
Rosana asintió con firmeza:
-Exacto, a eso me refiero. Si uno no se deja impresionar por la fachada de PZ, sus prácticas son sospechosas. Es una estafa, pero disfrazada muy bien.
Apenas terminó de hablar, Óscar en el asiento delantero soltó un suspiro de preocupación:
-Mi mamá también metió bastante dinero ahí. Eso sí que es un lío. Todo ese dinero era de su herencia y sus ahorros personales. Si lo pierde, no me imagino el desastre que sería en la familia.
Rosana miró a Dionisio con inquietud:
-¿Sabe si la señora Jurado también invirtió?
Dionisio dudó unos segundos antes de responder:
-No estoy seguro, pero si la señora Noelia ya puso dinero, es muy probable que mi mamá también haya participado.
Rosana sintió el peso de la situación:
-Jamás pensé que PZ pudiera engañar a tantas personas en tan poco tiempo. ¿Cómo es que estas señoras no sospecharon nada?
-A fin de cuentas, el deseo de ganar más siempre está ahí. Aunque desconfíen, nunca pensaron que una empresa tan grande se atrevería a algo así comentó Dionisio, encogiéndose de hombros.
Rosana frunció el ceño, molesta:
-Por eso estoy segura de que la mamá de Leonor está metida hasta el fondo con PZ y también es parte de este fraude.
Si lograba detener el engaño de PZ, pensó Rosana, podría encontrar por fin el paradero de la madre de Leonor.
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