Capítulo 6
El viento al otro lado del teléfono aullaba lo suficientemente fuerte como para ahogar su respiración.
“¿Te empacaste y te fuiste sólo por ese tipo?”
“¿Qué? ¿Sólo porque es rico? ¡Vaya, realmente eres tan barata!”
Mira, sé que estás enojada, pero si regresas ahora, aún puedo ofrecerte una
boda.
Miré por la ventana a la luna. Fría y plateada.
-Sí–respondí, con voz plana-. Porque es rico. Cien veces mejor que tú.
Escuché a Gerard respirar de forma brusca, como si estuviera tratando de
contener su ira.
Cuando volvió a hablar, sus palabras fueron duras.
-se burló
-¡Ja! ¿Acaso sabe que te tengo desde hace siete años? ¿Que has llevado mis hijos tres veces? Si se entera de todo eso, ¿crees que aún te querrá? –. ¡Yvaine, siempre serás mía!
Sentí un dolor sordo en mi pecho y se me hizo un nudo en la garganta. Me ardían los ojos y, por un momento, no pude decir ni una palabra.
Pero Gerard debió haberlo sentido, porque su tono cambió, ahora era más
suave.
-Cariño… todos estos años, todo lo que hemos pasado, ¿No fue nada real?
Me di cuenta de que quería decir más, pero luego escuché la voz de una chica
de fondo.
Gerard, el grifo de la bañera está roto. ¿Puedes venir a mirar?
No pude evitarlo, me reí. Luego colgué y desactivé esa estúpida cuenta alternativa para siempre.
Mis mejillas estaban frías y cuando toqué la cara, mis dedos salieron húmedos.
Me acerqué a Gerard sólo por una promesa. Eso es todo. Pero si pudiera hacerlo todo de nuevo, nunca habría aceptado.
Su madre solía ser mi vecina. Fue cuando yo acababa de escapar y todavía estaba tratando de averiguar cómo sobrevivir.
Ella había sido amable. Me enseñó cosas sobre el mundo que no conocía.
pítulo 6
2/3
56,7%
16:36 Fri, 14 Mar
༨. 22%.
Así fue como conocí a Gerard. Por aquel entonces, él tenía dieciocho años. Un chico rebelde que odiaba la escuela.
Al principio no éramos cercanos.
Luego su madre se puso enferma gravemente. Sabía que le quedaba poco tiempo y, en su lecho de muerte, me pidió que cuidara de él.
Dije que sí.
Así que entré en la vida caótica de ese adolescente rebelde.
Y me quedé allí durante nueve años.
Creí que había cumplido más que de sobra esa “promesa“.
-Cariño, ¿en quépensas? Es hora de salir.
La voz de mi madre me volvió a la realidad, Me dio un ligero empujón en el hombro.
Como había vuelto a casa, y debido a mi próxima boda con Glenn, mi padre había organizado una gran fiesta.
Los candelabros de cristal brillaban tanto que casi me cegaron. La gente reía, hablaba y chocaba las copas, y las cámaras parpadeaban por todas partes.
Me giré hacia un lado, tratando de evitar a la multitud, pero Glenn se interpuso frente a mí primero.
Me miró y sonrió.
Honestamente, parecía… decente, un buen tipo.
Si lo hubiera conocido primero, quizá las cosas habrían sido diferentes.
Pero había demasiados extraños en la fiesta, así que no me atreví a beber demasiado. Fingí estar un poco ebria y salí a tomar un poco de aire.
Las nubes se habían despejado, dejando la luna fría brillante en el cielo. Un par de estrellas tenues salpicaban los bordes.
Con la luz de la luna, noté que alguien se acercaba hacia mí.
Gerardo…
Parecía haber perdido algo de peso.
Y a su lado, aferrándose de su brazo, estaba Gwyneth, su vestido brillando bajo las tenues luces.
-Vuelve conmigo -dijo Gerard. No era una pregunta.
Ni siquiera respondí, simplemente me giré y me alejé.
Capitulo 6
2/3
56,7%
16:36 Fri, 14 Mar
22%
Pero su mano se disparó y agarró mi muñeca con tanta fuerza que me hizo
daño.
Frunciendo el ceño, grité bruscamente: “¡Suéltame!”
-¿Qué hará falta para que vuelvas conmigo? -Su voz se quebró y sus ojos se enrojecieron.
Quería reír, pero incluso la idea de curvar los labios me resultaba agotadora.
La suave y delicada voz de Gwyneth flotó sobre nosotros.
-Yvaine, lo siento. No quería que ustedes pelearan. Por favor, perdona a Gerard. Él… Él realmente te ama. -Su voz se quebró como si estuviera a punto
de llorar.
El sonido de la risa llegaba débilmente desde la casa, chocando con el frío silencio que nos rodeaba en el jardín.
-Gerard -dije-, ya no volveré contigo.
-¿En serio? ¡Nos conocemos desde hace nueve años, Yvaine! ¿Qué significan esos nueve años para ti?