Capítulo 62
Adam
Recibí un mensaje de texto de Kevin diciendo que vendría con Keira para pasar un rato y distraerla. Salí al frente de la casa para esperar su llegada, principalmente porque quería ver a Keira y asegurarme de que estuviera bien. Cuando llegó su coche, me sorprendió ver que en realidad era ella quien conducía. Ni siquiera sabía que tenía licencia de conducir.
Ella y Kevin salieron del coche, y me acerqué a ellos.
-No sabía que manejabas -comenté a Keira.
-Sí, no lo hago muy seguido, pero puedo manejar. Solo tenemos un coche para compartir y Kevin lo necesita más que yo; además, no me importa caminar -dijo Keira.
-¿Cómo te sientes hoy? -inquirí.
-Estoy bien, solo… -Se quedó en silencio y miró hacia abajo.
-Está bien. Creo que mi mamá está horneando algo, ¿quieres pasar a verla? -le pregunté.
-Sí, claro -respondió ella.
Entramos a la casa y llegamos a la cocina, donde mi mamá estaba colocando los ingredientes para hornear en la encimera. Levantó la vista, vio a Kevin y a Keira, y de inmediato corrió hacia ellos y los abrazó a ambos.
-Hola, estoy tan contenta de que los dos estén aquí. ¿Están bien? -les preguntó mi mamá.
-Estamos bien, lo superaremos -le dijo Kevin.
-Muy bien, ustedes llegaron a tiempo. Quiero intentar hacer unos cupcakes desde cero, sin caja. ¿Quieren ayudar? -les comentó mi mamá.
-Claro, quiero ayudar -dijo Keira.
Mi mamá asintió.
-¡Genial! Dean no está y estoy sola, ¡así que necesito ayuda! -Mamá se rio.
-Kev, ven conmigo afuera -le dije a Kevin y dejé a Keira y a mi mamá solas.
Salimos.
-¿Nate te envió algún mensaje? -le pregunté a Kevin.
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Capítulo 62
Nate me había enviado un mensaje esa mañana diciendo que el rumor en el equipo era que Colt ya no formaba parte del equipo. Sin embargo, no había sido exactamente expulsado; se graduaría con nosotros, pero estudiaría en casa y tendría que buscar consejería para controlar
su ira.
Según Nate, el padre de Colt había llegado a un acuerdo con la escuela, ya que Keira nunca denunció a Colt antes y no quería presentar cargos en su contra.
-Sí, lo recibí esta mañana, antes de que Keira se levantara. Es una tontería, pero al menos
estará lejos de ella, supongo -dijo Kevin.
-¿Se lo dijiste? -le pregunté.
-No, no está confirmado, y pensé que mañana, cuando ella llame a la oficina, sabremos si es
verdad -manifestó Kevin.
-¿Crees que deberíamos decírselo solo para advertirla? -le pregunté.
-No lo sé, no sé cómo lo tomará. Ahora mismo, estoy más preocupado por hacer que se
sienta mejor y evitar que se culpe a sí misma. Déjala simplemente hornear con tu mamá. Eso
es lo que le gusta hacer -dijo Kevin.
-¿A Keira le gusta hornear? -le pregunté.
-Sí, en realidad se le da bien -respondió.
-¿Por qué nunca probé nada de lo que ella horneaba? -le pregunté.
-Oh, sí lo has probado. Has comido sus galletas durante mucho tiempo, amigo -dijo Kevin.
-Tú dijiste que tu mamá hizo esas galletas le dije.
-Sí, bueno, digamos que admitir que Keira las hizo no se alinea con algunas de mis viejas
costumbres–dijo Kevin.
-Ya veo. ¿Discutiste con tu mamá anoche? -le pregunté.
-Ella hizo todo esto sobre ella, no sobre lo que le pasó a Keira o a mí. No sé cómo lo hace, de alguna manera siempre es sobre ella -indicó Kevin.
-Mi mamá notó que tu mamá tiene problemas -le dije.
-Ella siente que todos la juzgarán por ser madre soltera, y por eso Keira llevaba un vestido ajustado que provocó el ataque. Me soltó ese discurso de “pobre Janet” anoche -dijo él.
-Tu mamá está trastornada -le dije.
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Capítulo 62
Eventualmente, Kevin y yo subimos a la sala de cine a ver una película mientras Keira y mi mamá hacían cupcakes. Bajamos después de la película y Keira estaba poniendo glaseado
en unos cupcakes de chocolate.
-Se ven bien les dije.
-Prueba uno dijo mi mamá mientras le entregaba uno a Kevin y a mí.
Le di un mordisco y era un cupcake de chocolate, pero el centro tenía un relleno de mantequilla de maní.
-Vaya, mamá, estos son increíbles -dije.
-No puedo tomar el crédito por estos; Keira lo hizo todo -expresó mi mamá.
-Keira, ¿esta es tu receta? -le pregunté.
-Sí, la fui inventando sobre la marcha -respondió Keira.
Keira
Kevin y yo pasamos el día en casa de Laura y Adam. La verdad es que me sentía más cómoda en su casa que en la mía por el día.
Estábamos en la sala viendo televisión cuando sonó el celular de Laura. Me miró.
-Es la escuela —dijo.
Contestó la llamada, pero salió de la habitación para hablar.
-¿Creen que están llamando por lo que pasó? -les pregunté a los chicos.
-No estoy seguro, estarían llamando a tu… -Adam comenzó a decir cuando el teléfono de
Kevin comenzó a sonar.
-Mamá -dijo él mientras contestaba el teléfono-. ¿Cuándo? ¿Ahora? ¿Dijeron algo? Está bien, nos vemos allá -Terminó la llamada-. Nos esperan en la escuela a las tres.
Laura volvió a la habitación y dijo:
-La escuela quiere que estés allá a las tres para hablar sobre tu suspensión, Adam. Acabo de llamar rápidamente a tu padre, y aparentemente Janet acaba de recibir la misma llamada para estar en la escuela. Tu papá va a tener un abogado en espera, por si acaso.
-Mamá me acaba de llamar -dijo Kevin.
