Capítulo 13
Desarrollo Aurora y Surtido Moderno tenían un contrato de renovación por firmar, por tanto, Manuela se tomó medio día libre y se dirigió al grupo Surtido Moderno con un colega para discutir sobre su divorcio.
Al llegar a la sala de recepción, le informaron que Benjamín había salido por un asunto.
Manuela frunció el ceño y preguntó: “¿A dónde fue?”
La secretaria conocía a Manuela, sabía que era la esposa de Benjamín, y tras titubear un poco, finalmente dijo: “No me es conveniente decir…”
Manuela no quiso ponerla en aprietos y por eso solo preguntó: “¿Tienes su número de celular?”
La secretaria dudó un momento, pero le dio el número de Benjamín y acto seguido Manuela lo llamó por teléfono.
Pronto, al otro lado de la línea, una voz masculina y tranquila respondió: “¿Quién es?”
“Soy yo, Manuela.” En su voz había un tono de descontento, pero rápidamente agregó: “¿Dónde estás? ¿No dijiste que irías al ayuntamiento conmigo?”
Hubo una pausa antes de que él respondiera: “Consuelo hoy vuelve al país, fui a recogerla.”
Manuela no quiso perder el tiempo y fue directo al grano: “¿Cuándo regresas? Tenemos que finalizar los papeles del divorcio.”
“Tengo otros planes con Consuelo.” Respondió Benjamín.
“¿Qué…?” Antes de que Manuela pudiera terminar de hablar, Benjamín colgó la llamada.
Mientras el sonido de la llamada colgada resonaba en su oído, los dedos de Manuela se cerraron lentamente alrededor de su teléfono.
Benjamin había estado ansioso por divorciarse de ella durante el último año, y en ese momento que finalmente podía cumplir su deseo, había puesto como prioridad ir a recoger a Consuelo. En su corazón, nada parecía ser más importante que Consuelo.
Manuela sintió un nudo en el pecho, pero rápidamente ajustó sus emociones.
En su vida pasada, si Benjamín la hubiera dejado por Consuelo, se habría sentido tan mal que no habría podido comer durante días, pero actualmente, aunque todavía le dolía un poco, esa sensación era casi insignificante y como Benjamín no la amaba, el divorcio tenía que ser rápido.
En su nueva vida, no le daría la oportunidad de herirla nuevamente.
Por otro lado, Benjamín colgó el teléfono y levantó la vista para ver a Consuelo, vestida con un largo vestido blanco, acercándose con su maleta.
16.05
Capitulo 13
Desde que Consuelo se fue al extranjero a estudiar hacía tres años, sus encuentros habían sido
escasos.
Benjamín había pensado en ella día y noche, pero al verla, no sentía la alegría que había anticipado, por el contrario, su mente estaba llena de pensamientos sobre el divorcio con Manuela.
Le había dicho directamente a Manuela que estaba recogiendo a alguien en el aeropuerto, con la esperanza de ver su reacción, sin embargo, a ella no le importaba a quién estaba recogiendo, solo le interesaba el divorcio, y eso lo hizo sentir incómodo.
No sabía exactamente qué quería, pero sabía que no le gustaba la sensación de ser rechazado por Manuela.
Consuelo llegó hasta él y agitó su mano frente a sus ojos mientras preguntaba: “Benjamín, ¿no estás contento de que haya vuelto?”
Benjamín volvió en sí y le sonrió cálidamente a la vez que decía: “¿Cómo no iba a estarlo?”
Rara vez sonreía, pero Consuelo era la excepción.
Para él, Consuelo no solo era su primer amor, sino también su salvadora. Era la mujer más importante de su vida.
Que Manuela quisiera divorciarse de él era lo mejor que podía pasar, así, podría estar con Consuelo legítimamente. Sin embargo, al pensar en eso, no sintió alegría alguna.
Benjamín intentó ignorar el malestar dentro de él y le pidió a su nuevo asistente, Enrique, que se encargara del equipaje de Consuelo, mientras él le tomaba la mano y le decía: “Hace tres años que no vienes, te llevaré a dar un paseo.”
Consuelo suspiró y comentó: “Si, han pasado tres años. Si no fuera porque Manu puso algo en mi maleta…”
No terminó la frase, y como si se diera cuenta de que no debería haberlo mencionado, se detuvo de inmediato.
Aunque no terminó de hablar, Benjamín entendió lo que quería decir.
Consuelo había ido al extranjero a estudiar, y se suponía que debía haber regresado el año pasado, pero el día que ella regresó, Manuela había hecho que colocaran cosas indebidas en su maleta, lo que la llevó a ser incluida en la lista negra de la aduana, impidiendo su regreso al pais por un largo tiempo.
Fue desde ese momento que él perdió completamente la paciencia con Manuela.
De repente, recordó lo que había sucedido la noche anterior. Solo había escuchado una versión de Omar y ya había asumido que Manuela le había sido infiel.
El año pasado, también solo escuchó la versión de Consuelo y asumió que Manuela fue la responsable de que Consuelo no pudiera regresar al país…
16:05
Al darse cuenta de en qué estaba pensando, la mirada de Benjamín se volvió más fría.
Estaba realmente obsesionado, hasta el punto de sospechar de Consuelo. En el mundo, cualquiera podría traicionarlo, excepto Consuelo, eso lo había confirmado hacía cinco años.
Al no esperar a Benjamín, Manuela regresó a la oficina con sus compañeros.
En la tarde, con el crepúsculo cayendo, ella salió del edificio de oficinas y en ese momento el tono de su celular sonó, era su amiga Francisca Bustos quien la llamaba.