Capítulo 137 

Bajo la sombra de un frondoso árbol de higuera, cuyo tronco grueso lograba ocultar parte de la escena, Noemí, con los brazos cruzados y una mirada desafiante, fue la primera en hablar. 

“Señorita Soler, si tiene algo que decir, dígalo de frente.” 

Jordana, manteniendo su compostura, miró directamente a Noemí y dijo con calma: 

“Alguien ha estado difamándome en internet bajo tus órdenes.” 

Su tono era tan seguro y contundente que daba la impresión de que conocía todos los movimientos de Noemí. 

Al escuchar esto, la expresión de Noemí cambió ligeramente. 

Había instruido a Tadeo para que mantuviera su identidad en secreto al contactar a los difamadores, para evitar que Álvaro sospechara de ella. 

Sin embargo, Jordana había descubierto la verdad con una simple mirada. 

Mientras su rostro mostraba una mezcla de sorpresa y duda, Noemí notó con el rabillo del ojo una figura familiar acercándose. 

Jordana había ido allí solo para confirmar sus sospechas. 

Al ver la reacción de Noemí, Jordana se sintió casi segura de que había sido ella quien estaba detrás del comunicado difamatorio. 

Sin decir ni una sola palabra, esperó pacientemente a que Noemí se defendiera. 

Noemí, en cambio, esbozó una ligera sonrisa en sus labios, y finalmente habló con franqueza. 

“Sí, fui yo quien mandó difundir esos rumores. ¿Y qué vas a hacer al respecto? ¿Tienes pruebas? ¿Qué puedes hacerme?” 

A pesar de que sabía que Noemí estaba intentando provocarla, Jordana no pudo contenerse y le propínó una bofetada. 

Ella supuso que Noemí había actuado de esa manera porque Álvaro había llegado. 

Pero, sin importar quién estuviera presente, eso no cambiaría la situación. Después de todo, Noemí prácticamente había pedido ser golpeada. 

El sonido de la bofetada atrajo la atención de varios transeúntes, que les observaban con curiosidad, aunque el tronco del árbol les impedía ver completamente lo sucedido. 

“¡Noemí!” 

La voz de Álvaro resonó mientras se acercaba con prisas. 

Desde su punto de vista, solo podía ver a Noemí de pie. 

Fue solo cuando se acercó un poco más que notó que Jordana se encontraba al lado de 

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Capítulo 137 

Noemí, 

Álvaro había llevado a Noemí al set de grabación esa mañana específicamente para confrontar a Jordana, pero no la había visto en todo el día. 

Después de decirle a Noemí que se fuera primero, se quedó conversando con el director, donde se enteró de que Jordana solo había participado en la filmación el día anterior. 

Desesperado, al ver a Jordana, sus ojos se iluminaron. 

Antes de que Álvaro pudiera acercarse, Noemí ya estaba cubriéndose la cara, fingiendo estar devastada. 

“Álvaro, Jordana vino aquí para hablar conmigo, así que vine. Pero sin más, me abofeteó.” 

Su tono era de pura victimización, aunque estaba claro que Jordana la había golpeado. 

De hecho, Noemí había buscado provocarla de forma deliberada, esperando ser golpeada como parte de su plan. 

Su objetivo era mostrar a Álvaro que Jordana era una persona arrogante y malvada, capaz de ser violenta, mientras que ella era una víctima inocente y merecedora de la simpatía de las demás personas. 

Y la gente siempre tendía a simpatizar con la víctima. 

Álvaro, sintiendo lástima por ella, inevitablemente desarrollaría una aversión hacia Jordana, disuadiéndolo de cualquier intento de reconciliación. 

Álvaro rápidamente se puso del lado de Noemí, protegiéndola con su cuerpo mientras miraba a Jordana con el ceño fruncido y una mirada acusatoria. 

“Jordana, ¿golpeaste a Noemí?” 

Al haber compartido un techo con Jordana durante tres años en la Mansión Luna Azul, Álvaro creía conocerla bien. 

Él sabía que Jordana, con su temperamento volátil, era capaz de actuar de esa manera. 

Al proteger a Noemí sin dudarlo, Álvaro mostró su apoyo incondicional a su favorita. 

Jordana podía imaginar que, de haberse quedado en la Mansión Luna Azul, este tipo de incidentes habrían sido frecuentes. 

Sin embargo, ya había abandonado ese lugar, y Álvaro ya no significaba nada para ella. 

Una persona aparentemente insignificante se puso de pie para proteger a su amada bajo la luz de la luna, Jordana no lo encontró desagradable, incluso pensó que eran una pareja perfecta, puesto que ambos poseían talento y belleza. 

“No la golpeé, ¿con cuál de tus ojos viste que la golpeé?” 

Jordana se encogió de hombros, y se expresó con un tono indiferente: 

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Capítulo 137 

“Ella te vio llegar y se propinó una bofetada a sí misma. No es broma, realmente fue dura consigo misma.” 

La cara de Noemí se puso roja de ira. “Estás mintiendo, claramente fuiste tú quien me golpeó.” 

Jordana arqueó una ceja, preguntando a cambio con frialdad: 

“¿Quién me vio golpearte? ¿Puedes encontrar algún testigo? Si no puedes encontrar un testigo, entonces no deberías difamar a la gente con tanta facilidad.” 

“¡Tú…!” 

El rostro de Noemí, alternando entre rojo y pálido, se veía especialmente fea. 

No era tonta, naturalmente entendió que Jordana simplemente estaba usando sus propias palabras contra ella. 

Con una expresión indiferente y una mirada irónica hacia Noemí, Jordana simplemente estaba devolviéndole el golpe con su propia medicina. 

¿Así que Noemí no era capaz de mantener la calma? 

Cuando las dos estaban enfrentadas. 

Álvaro, con una expresión seria, intervino: “Jordana. No soy tonto, sé que fuiste tú quien golpeó 

a Noemí.” 

“Pídele disculpas a Noemí, y dejaremos pasar esto.” 

En el fondo, Álvaro se sentía un poco complacido. 

El hecho de que Jordana y Noemí tuvieran un conflicto y que Jordana negara haber golpeado a Noemí, en su opinión, solo probaba que esta todavía se preocupaba por él. Jordana no quería admitir la realidad, todo con el fin de mantener su imagen frente a él.