Capítulo 140
Esther no le dio a Paula ninguna oportunidad de rechazarla, su agarre firme pero elegante mientras la conducía lejos de los curiosos. Los estudiantes que presenciaron la escena comenzaron a murmurar entre sí, sus voces un zumbido de especulaciones maliciosas.
-¿No será que Esther está celosa porque sabe que Paula y el presidente De la Garza son cercanos? -susurró una voz entre la multitud.
-Debe ser que vino a pedir cuentas, ¿de otra manera por qué tendría esa expresión?
-Esther realmente se toma muy en serio todo esto comentó otro con desdén-. ¿Cómo va a estar celosa si al presidente De la Garza le gusta Paula? ¿Quién no sabe que su título de prometida es solo para aparentar?
Al escuchar estos comentarios malintencionados, Clara les lanzó una mirada fulminante, sus ojos brillando con indignación.
-¿Qué están diciendo? ¡Repítanlo! -desafió, su voz cortante como el acero.
Los murmullos cesaron abruptamente. Sabiendo que Clara era la hija del director del periódico,
los estudiantes retrocedieron nerviosos.
-Clara, ¡estábamos hablando sin pensar! -se apresuraron a disculparse.
-Sí, sí, ¡estábamos diciendo tonterías! No lo tomes a pecho.
-Les advierto el tono de Clara descendió varios grados-, si alguien vuelve a hablar mal de Esther, verán que les haré pagar.
Un silencio sepulcral se apoderó del grupo. Nadie se atrevía a desafiar a Clara, quien contaba con el respaldo de sus padres, a diferencia de Esther, que solo tenía una madrastra y nadie que la defendiera.
Mientras tanto, Esther había arrastrado a Paula hasta un aula vacía. La chica, fingiendo vulnerabilidad, miró a Esther con ojos suplicantes.
-Prima… me lastimaste -se quejó Paula, frotándose la muñeca.
-¿Qué dijiste frente a Samuel? -preguntó Esther directamente.
-Yo… -Paula mordió su labio con falsa inocencia-. No dije nada.
Esther esbozó una sonrisa que no llegó a sus ojos.
-No suelo recurrir a la violencia, pero… si alguien desafía mis límites, optaré por actuar.
-Prima… realmente no sé de qué estás hablando -Paula dejó que las lágrimas asomaran a sus ojos-, No sé quién te ha contado chismes, pero realmente no he hablado mal delante del presidente De la Garza.
19
Capitulo 140
-Ahórratelo cortó Esther-. Tus compañeros de clase lo vieron hoy, y yo también. Negarlo no sirve de nada.
La aparición de Clara en la puerta hizo que el semblante de Paula empeorara visiblemente.
-También sabes que para poder estudiar en el INC, te beneficiaste de mi ayuda -continuó Esther con tono indiferente-. Si no, Samuel no habría accedido a darte una oportunidad. Paula, te daré otra oportunidad, ¿hablarás o no?
-¡Hablaré, hablaré! -exclamó Paula-. Fui yo quien falló, prima, no fue intencional. Fue el presidente De la Garza, él insistió en preguntarme. Después de todo, él me ayudó a entrar al INC, si no le decía la verdad, temía que me echara.
Paula se aferró al brazo de Esther con desesperación.
-Prima, fui yo quien se equivocó, lo siento, pero… pero lo que dije es verdad. Ya te has comprometido, ¿cómo puedes estar tan cerca de otro hombre? Prima, no te enojes conmigo, incluso si delante del presidente De la Garza hablé bien de ti…
Esther observó a Paula, recordando aquella escena en el Grupo De la Garza, cuando Paula se arrodilló para limpiar los zapatos de Samuel. Era obvio que sus intenciones hacia él no eran
inocentes.
-No importa -dijo Esther con una sonrisa calculada-, simplemente estás diciendo la verdad. Tampoco dije que me iba a enojar contigo..
-¡Esther! ¿Cómo no te puedes enojar? -intervino Clara, furiosa.
-No sirve de nada enojarse–respondió Esther mirando fijamente a Paula-. Si Samuel empieza a sospechar de mi relación con el presidente Betancourt y en un arranque de ira termina nuestro compromiso, ¿crees que tú, una estudiante que entró por la puerta trasera al INC, tendrías algún futuro asegurado?
La expresión de falso agravio en el rostro de Paula se congeló instantáneamente, sus ojos revelando por fin el miedo real que sentía.