Switch Mode

A Reina Novela 103

A Reina Novela 103

Capítulo 103 

Esther, si se subía a un taxi y pasaba despreocupadamente por delante de la casa de los De la Garza y Montserrat la veía, ¡estaría acabada! Las implicaciones sociales de tal acto resonaban en su mente como campanadas de advertencia. Por un instante, la antigua Esther aquella que se doblegaba ante cualquier amenaza- amenazó con emerger

Pensando en esto, el conductor inmediatamente arrancó el coche intentando alcanzar a Esther. El rugido del motor reflejaba su desesperación, consciente de que su posición privilegiada pendía de un hilo

Al ver al conductor persiguiéndola desesperadamente por el retrovisor, Esther no pudo más que soltar una fría carcajada. Una sensación de poder, nueva y embriagadora recorría su cuerpo. Las viejas cadenas del miedo y la sumisión comenzaban a oxidarse

El jefe era demasiado blando, y esos que trabajaban para él se aprovechaban. Esa revelación cayó sobre ella como agua fría, cristalizando años de observaciones y humillaciones 

silenciosas

Después de todo, ella era la señorita Montoya, una cliente, y el conductor no era más que un empleado, atreviéndose a ser tan grosero con una cliente en nombre del jefe. La indignación burbujeaba en su interior, mezclándose con una nueva determinación

Antes, se había aguantado y tragado su orgullo. Las memorias de cada desplante, cada humillación sutil, cada comentario malintencionado desfilaron por su mente. Una tras otra, como cuentas de un rosario de amargura

Esta vez, no iba a tolerarlo más. La decisión se asentó en su estómago como una roca, firme

inamovible

Pronto, el taxi se detuvo frente a la gran entrada de la casa de los De la Garza. Los rayos del sol se reflejaban en los ventanales, creando un espejismo de grandeza que ya no la intimidaba

Aunque Montserrat se había mudado, este lugar, aunque no era la casa principal de los De la Garza, también estaba en una zona de villas. La opulencia del vecindario solo servía para resaltar lo impropio de su llegada en taxi

Cuando Montserrat vio a través de la ventana a Esther bajándose del taxi, su rostro se ensombreció y dijo con voz cortante

-¿Qué pasa aquí? ¿No mandé a Benjamín por ti? ¿Dónde está

– 

Doña Montserrat, esto… 

Uno de los sirvientes, igualmente confundido, no sabía qué había pasado. La tensión en el aire era palpable

-¡Qué escándalo! ¿Acaso esto no es para que todo el vecindario se burle de

Montserrat bajó las escaleras algo molesta, sus tacones resonando contra el mármol como pequeños martillazos de desaprobación

Capítulo 103 

Al ver que Esther ya había entrado, Montserrat se acercó y dijo

-Esther, ¿qué pasó? ¿Benjamín no fue por ti

-Señora matriarca, Benjamín en efecto fue, pero-Esther hizo una pausa calculada, saboreando el momento- creo que Benjamín prefería a la señorita Miravalle, así que decidí bajarme

Apenas Esther terminó de hablar, el conductor entró tropezando por la puerta, como un actor tardío en una obra de teatro

El rostro de Montserrat se ensombreció y dijo

-Te mandé a recoger a Esther, ¿y qué hiciste

-Doña, doña Montserrat-El conductor, con el rostro desencajado, trastabilló con sus propias palabras- Yosolo estaba charlando un poco, ¡quién iba a decir que la señorita Montoya se iba a enojar! Y terminó haciendo esto, tan indigno, ay, es culpa mía. No debí haber hablado sin pensar. Solo le sugerí a la señorita Montoya que debía concentrarse más en el presidente De la Garza, quién iba a imaginarquién iba a imaginar que la señorita Montoya reaccionaría así. Ahora bien, si la gente se entera, ¿no estaríamos manchando su reputación, doña Montserrat

El conductor había estado con Montserrat muchos años y conocía muy bien su carácter. Lo que más le importaba a Montserrat era su imagen, un punto débil que él esperaba explotar

Algo como que un invitado llegara a su casa en un taxi nunca había pasado antes. Esta era la primera vez, y el peso de ese precedente flotaba en el aire como una nube de tormenta

Como era de esperarse, al escuchar lo que decía el conductor, el rostro de Montserrat se oscureció aún más. Sus labios se apretaron en una línea fina y tensa

Sin embargo, Esther intervino, su voz clara Y firme

-Benjamín, eso no es algo que se diga a medias, ¿acaso no fuiste quien me dijo que no creyera que con solo ganarme el favor de doña Montserrat todo estaría bien, y que además dijiste que yo era una desagradecida y que no tenía ni la decencia de la señorita Miravalle

-Esto… 

-Sabes muy bien que la señorita Miravalle ha estado maquinando para convertirse en la señora del Grupo De la Garza, y aún así, la elogias mucho -continuó Esther, cada palabra un dardo envenenado-. También has dicho que la señorita Miravalle nunca ha sido dura con ustedes, los empleados que ya tienen algo de experiencia. Esto demuestra que realmente apruebas a la señorita Miravalle como persona y también deseas que ella se convierta en la señora de la familia De la Garza, ¿verdad

Las palabras de Esther hicieron que el conductor empezara a sudar frío de inmediato. El sudor perlaba su frente como pequeñas gotas de culpabilidad

Lo que más detestaba Montserrat era a Anastasia. Que otros hablaran bien de ella era una cosa, pero que un empleado veterano como él hablara a favor de Anastasia, jeso realmente había enfurecido a Montserrat

915 

Capitulo 103 

Tal como se esperaba, Montserrat dijo fríamente

-Ah, así que hablas bien de la mujer de la familia Miravalle, ¿crees que con eso ya has hecho tu parte hacia la futura señora del Grupo De la Garza

-¡Doña Montserrat! No quise decir eso, yo-la voz del conductor se quebró, consciente de su 

error fatal 

-Creo que ya estás grande de edad, sería mejor que te retiraras ahora 

La sentencia cayó como una guillotina, cortando de tajo años de servicio y lealtad. En el silencio que siguió, Esther sintió una pequeña sonrisa de satisfacción curvando sus labios. Otra parte de la antigua Esther había muerto en ese taxi, y de sus cenizas emergía una mujer que ya no temía usar las mismas armas que habían usado contra ella

A Reina Novela

A Reina Novela

Score 9.9
Status: Ongoing Type:
A Reina Novela

Comment

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Options

not work with dark mode
Reset