Capítulo 79
Roque se apartó, evitando su mirada con cierta incomodidad. Hasta entonces, nadie había defendido a Jordana, y Roque había asumido naturalmente que ella siempre estaba equivocada, sintiendo repulsión hacia ella como si fuera lo más obvio. Cuando Lorenzo defendió a Jordana, Roque lo atribuyó a un favoritismo hacia ella. Pero ahora que Raquel defendía a Jordana, con argumentos sólidos y razonables, ni siquiera Verónica e Ignacio pudieron rebatir.
Roque había crecido bajo la influencia de Verónica e Ignacio, y solo después de escuchar a Raquel y a Otilia se dio cuenta de que no todo lo que Jordana había hecho estaba mal. Como la disputa entre Jordana y Petrona por algunas posesiones, Jordana también tenía el derecho a reclamar. No tenía por qué cederlo todo a Petrona, así como él no cedía ante Máximo en todo, pero esperaba que Jordana siempre se hiciera a un lado por Petrona…
Petrona se sintió como si viera hundirse su última esperanza, su rostro se volvió pálido como si hubiera sido golpeada por un rayo. Al ver de reojo a Jordana observando con una sonrisa sarcástica, Petrona recordó cómo solía ser ella quien observaba a Jordana ser criticada sin nadie que la defendiera, disfrutando de su desgracia. Ahora, los roles parecían haberse invertido.
Lo que le confundía era por qué Máximo había cambiado su trato hacia ella y, más aún, por qué Roque, quien siempre la había protegido, hoy no lo hizo. ¿Acaso habían aceptado las palabras de Raquel y creían que ella estaba equivocada? Petrona sintió un escalofrío, consciente de que no podía permitir un distanciamiento con Máximo y Roque. Había observado cómo trataban a Jordana a lo largo de los años y no quería ser tratada de la misma manera.
El rostro de Petrona cambiaba de rojo a pálido, con los ojos llenos de lágrimas, su apariencia vulnerable inspiraba compasión. Sin embargo, Jordana no sentía ni la más mínima simpatía por Petrona, encontrando un cierto placer en ver cómo la fortuna de Petrona cambiaba para mal.
Aunque Jordana notó la actitud inusual de Máximo y Roque, no tenía interés en profundizar en sus razones. Sabía que antes la persona señalada era ella y ahora, finalmente, era el turno de Petrona de experimentar el amargo sabor de ser el centro de las críticas mientras sus seres queridos miraban desde la distancia.
“Señora, Otília, me han malinterpretado. Solo estaba intentando hablar con mi hermana, nunca quise presionarla“, dijo Petrona torpemente, con una expresión de pánico en su rostro inocente. Sabía que solo mostrándose sumisa podría recuperar su imagen ante Máximo y Roque.
Después de explicarse con Raquel y Otilia, Petrona bajó la mirada hacia Jordana y, con una sinceridad aparente, se disculpó: “Hermana, es mi culpa. No debería haber preguntado. Solo quería tanto esa pulsera de jade. Fue un error de mi parte no considerar cómo te sentirías, lo siento. Espero que puedas perdonarme.”
Su tono humilde y sincero parecía el de alguien que, al darse cuenta de su error, estaba listo para enmendarlo. Solo Petrona sabía que no se sentía culpable en absoluto. Su fracaso en
12
16-20
910
Capitulo 79
esta ocasión podía resumirse perfectamente en el dicho “quien mucho abarca, poco aprieta“.
Ella, en aquel momento, estaba tan enfurecida que casi escupía sangre, pero no tenía otra opción más que inclinarse ante Jordana.