Capítulo 403
“No se hace tarde,” explicó Camilo. “Para fomentar el pensamiento de los pequeños, es necesario tenerlos cerca desde pequeños, influyendo en ellos poco a poco.”
“Para que sepa cómo manejar cualquier situación.”
“Y no debe ser una visión limitada…”
“Si solo se enfoca en los beneficios inmediatos, la empresa puede prosperar rápidamente a corto plazo, pero al final, desaparecerá de la noche a la mañana.”
“Por eso, lo mejor es que ella tenga una visión más amplia.”
No esperaba que Camilo ya hubiera planeado todo tan a largo plazo: “Te apoyo.”
Al ver que no me oponía, finalmente Camilo se relajó y añadió: “Gracias por apoyar mi decisión.”
Le respondí con una sonrisa: “¿No es lo que se supone que debo hacer?”
“Dora es tu hija.”
“Ella también es muy buena conmigo, y la considero como si fuera mi propia hija.”
“Ahora que sé que quieres prepararla como tu sucesora, me alegra más de lo que imaginas.”
“Así que no te preocupes por mí.”
Camilo me abrazó con fuerza y me dijo: “Entonces, a partir de mañana, dedicaré un tiempo a estar con Dora y, de paso, enseñarle algunas lecciones.”
“Está bien.”
Después de la conversación, regresé a la habitación, me acosté en la cama y miré al techo.
Camilo ya había pensado en lo que haría Dora después de graduarse de la universidad…
Por lo tanto, a partir de mañana, debería acelerar mi ritmo de trabajo.
Después de terminar los dibujos de los cómics que estaba actualizando, dedicaría el resto del tiempo a trabajar en otro cómic de amor.
De esta manera, podría actualizar dos cómics al mismo tiempo, podría ganar algo más de dinero.
Aunque…
Ahora tenía un novio, y la verdad era que era una buena persona.
Pero aun así, ganar más dinero me daría más seguridad…
Además…
Mi actual jefe era una buena persona y estaba dispuesto a compartir tantos beneficios
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Capítulo 403
conmigo.
¡Debía aprovechar esta oportunidad que no era fácil de conseguir!
Marcelo solía vivir en mansiones que parecían haciendas, pero ahora tenía que conformarse con una casa pequeña y estrecha. Miró su teléfono durante mucho tiempo antes de finalmente llamar a Camilo.
Camilo preguntó: “¿Qué sucede?”
“Puedo aceptar tu oferta,” dijo Marcelo sin cambiar su expresión. “¿Cuándo harás la transferencia que me prometiste a mi cuenta?”
Estaba ansioso por volver a la cima.
Y por reconciliarse con Amparo.
Marcelo todavía pensaba en Amparo.
La voz de Camilo era tan fría como siempre. “Mañana.”
“Siempre y cuando puedas garantizar que no le dirás la verdad a Amparo, que el que estará hablando con ella serás tú, no yo…”
“Y puedo intentar ayudarte a resolver algunos problemas que encuentres en el desarrollo de tu empresa.”
Esa era una gran noticia para Marcelo: “No lo diré.”
Al escuchar lo que dijo, Camilo sonrió: “Espero tus buenas noticias.”
Tan pronto como Marcelo consiguió la respuesta que quería, sacó otro teléfono, creó un nuevo número de WhatsApp y añadió a Amparo.
El mensaje decía: “Soy Camilo, este es mi número secundario.”
Amparo casi de manera inmediata aceptó la solicitud de amistad y tomó la iniciativa de enviarle un mensaje a Marcelo: “¿Por qué decides agregarme ahora?”
Marcelo miró fijamente su teléfono.
Hace unos días, cuando se comunicó con Amparo, ella todavía decía que el hombre que amaba era él…
Y que no había dejado que nadie más la tocara.
Pero debido al embarazo, y a la radiación del teléfono, no podía usarlo.
Así que no pudo responder a su mensaje al instante.
Marcelo lo entendió.
Después de todo, Amparo había sido muy delicada cuando estaba embarazada de Fernando.
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Capitulo 403
Pero lo que no esperaba era que casi fueran las doce de la noche…
Y Amparo todavía estaba despierta, jugando con su teléfono.