Capítulo 357
Antes, incluso había sentido lástima por Helena… Se había dejado de orgullos, esforzándose en conquistar a Camilo… Y Camilo ni siquiera se conmovió.
Fue después de hablar con Camilo sobre este proyecto, que de repente se dio cuenta… Un hombre como Camilo, definitivamente no era alguien que su hija pudiera manipular.
Helena, levantando la barbilla con orgullo, dijo: “¡Por supuesto!” “¿Por qué crees que, teniendo tantas opciones, elegí precisamente hacerla mi amiga?”
Julián, conmovido, comentó: “Tu habilidad para elegir amigos siempre ha sido terrible. Por una vez que encuentras a alguien valioso y resulta ser una bendición disfrazada.”
Helena soltó una risa incómoda. Lo que quería decirle a su padre era… ¡Que nunca había tenido buen ojo para las personas! Al principio, en realidad veía a Ofelia como una rival en el amor…
Helena entrecerró los ojos. Las personas que le agradaban nunca resultaban ser buenas elecciones. ¿Y las personas que no le gustaban resultaban ser aceptables? Quizás en el futuro debería elegir amigos solo entre las personas que no le agradaban.
Julián le dio una palmada en el hombro a Helena: “Aprecia a estos amigos.”
Helena, con una expresión seria, le aseguró: “No te preocupes, papá, lo haré.”
Julián se detuvo en la puerta principal y le dijo a Helena: “Vuelve al trabajo.”
Helena se quedó parada allí. Julián le hizo un gesto con la mano antes de marcharse.
Al regresar a la oficina, Helena se sentó a mi lado inmediatamente y preguntó: “¿Entendiste lo que estaban hablando?”
Con tantos términos técnicos juntos. Helena estaba completamente perdida, sin entender de qué hablaban exactamente.
Al ver su curiosidad, se lo expliqué despacio: “En definitiva, lo que tu padre debe hacer es seguir adelante con el proyecto normalmente. Cuando falte financiamiento, la otra parte buscará excusas para retirar su inversión. En ese momento, tu padre, acompañado de un abogado, deberá confrontarlos y preguntarles si planean desentenderse del proyecto. Ellos, queriendo presionar a tu padre, seguramente dirán que sí. Entonces, tu padre preguntará por las inversiones previas.” “Probablemente dirán que se consideren como pérdidas“.
Mirandola desde mi asiento, continué: “A ese punto, tu padre puede traer la inversión de
Camilo“,
Al escuchar esto, Helena finalmente entendió: “Entonces, ¿eso significa que lo que invirtieron antes, básicamente nos beneficia a nosotros?”
Asenti: “Aunque es probable que Camilo les dé una lección y luego encuentre una manera de devolverles el dinero que invirtieron“.
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Capitulo 357
Helena no entendía: “¿Por qué?”
Ellos tenían malas intenciones, como si quisieran llevar a su familia a la bancarrota. ¡Creía que deberían pagar un precio!
Solté una leve sonrisa y dije: “En el mundo de los negocios, tener demasiados enemigos no es bueno. Si algún día al Grupo Heredia le sucede algo, todos aprovecharán para atacar“.
“En la mayoría de los casos, no vale la pena llegar a tales extremos.”
Helena murmuró con reluctancia: “Pero ellos sí que fueron extremos.”
Escogiendo mis palabras cuidadosamente, dije: “Si al hacerles esto su compañía se fuera a la quiebra, quizás podrías hacer lo que sugieres.”
“Pero la realidad es que, incluso si les quitamos su dinero, no les afectaría mayormente.”
Finalmente, Helena aceptó, aunque a regañadientes: “Está bien, entonces.”
Parecía que la fortaleza de su familia aún era insuficiente… Si fueran un poco más fuertes… La otra parte no se atrevería a planear contra ellos de esta manera.
Recordando algo, Helena de repente levantó la mirada hacia Camilo: “Me acabo de dar cuenta; él es demasiado astuto, ¿verdad?”
No pude evitar sonreír: “¿Qué te hace decir eso de forma tan repentina?”
Helena se giró y dijo: “¿Solo estaba desahogándome contigo sobre la idea de forzar un matrimonio, y él de inmediato se viene con un plan perfecto?”
